Historias inspiradoras: Indra Nooyi, trabajar más que los demás para triunfar

por | Mar 8, 2013 | Destacados, Historias Inspiradoras, Negocios

Indra Nooyi es india, presidenta y directora ejecutiva de Pepsico (la segunda potencia multinacional de refrescos) y «la ejecutiva más poderosa del mundo«, según la revista Fortune. Logró impulsar el cambio de la compañía hacia un modelo más consciente de la salud y el impacto medioambiental. Mujer, esposa, madre, ama de casa y hasta «ama de llaves» -según bromea- se convirtió en la primera CEO de la empresa nacida fuera de los Estados Unidos.

Indra Nooyi

Ha llegado a lo más alto

Indra Nooyi fue nombrada Presidenta y CEO de Pepsico el 1 de octubre de 2006 y asumió el cargo de Presidenta el 2 de mayo de 2007. Ha dirigido la estrategia mundial de la compañía durante más de una década y dirigió su reestructuración, incluida la enajenación de sus restaurantes que se convirtieron en los prósperos YUM! Brands, Inc., la adquisición de Tropicana, la fusión con Quaker Oats que atrajo consigo los vitales negocios de Quaker y Gatorade a PepsiCo y la fusión con las principales compañías embotelladoras de PepsiCo.

Antes de convertirse en CEO, Indra Nooyi ejerció de Presidenta y Directora Financiera a principios de 2001, cuando también fue nombrada para el Consejo de Administración de PepsiCo. En este cargo, era responsable de las funciones corporativas de PepsiCo, incluida la optimización de los procesos financieros, estratégicos y comerciales, las plataformas corporativas y la innovación, adquisiciones, relaciones con los inversores y tecnología de la información. Entre febrero de 2000 y abril de 2001, Indra Nooyi fue Vicepresidenta Primera y Directora Financiera de PepsiCo. Entre 1996 y 1999, Indra Nooyi fue Vicepresidenta Primera de Estrategia y Desarrollo Corporativos.

Antes de incorporarse a PepsiCo en 1994, Indra Nooyi ocupó durante cuatro años el cargo de Vicepresidenta Primera de Estrategias y Marketing Estratégico para Asea Brown Boveri, una empresa industrial con sede en Zúrich. Allí formó parte del principal equipo de gestión responsable de los negocios de la compañía en EE.UU. así como de sus negocios industriales en todo el mundo, que representaban aproximadamente 10.000 millones de $ de los 30.000 millones de $ de ABB en ventas mundiales.

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Entre 1986 y 1990, Indra Nooyi trabajó para Motorola, donde fue Vicepresidenta y Directora de Estrategia Corporativa y Planificación. Antes de incorporarse a Motorola, dedicó seis años a la dirección de los proyectos internacionales de estrategia corporativa  en The Boston Consulting Group.

Indra Nooyi inició su carrera en India, donde ocupó cargos de gerente de productos en Johnson & Johnson y en Mettur Beardsell, Ltd., una empresa textil.

Además de ser miembro del Consejo de Administración de PepsiCo, Indra Nooyi forma parte de la junta del Consejo Empresarial EE.UU.-China, el Consejo Empresarial EE.UU.-India, el Foro de Bienes de Consumo, Catalyst, Lincoln Center for the Performing Arts, The Peterson Institute for International Economics, Grocery Manufacturers Association y la Federación de Fútbol de EE.UU. Asimismo, es una Successor Fellow de Yale Corporation y fue nombrada para el Foro de Directores Generales EE.UU.-India por la Administración Obama.

Y ¿de dónde viene? 

Nació en Madrás (India) el 28 de octubre de 1955 en el seno de una familia fuertemente marcada por la influencia materna.  Estudió Matemáticas, Física y Química, Máster en Administración de Empresas por el Indian Institute Management de Calcuta. Al acabar, su primera ocupación la consiguió en Tootal, una compañía textil británica. Al poco, la contrató Johnson & Johnson, fabricante de productos para el cuidado personal. Ahí empezó a experimentar la sensación de que tal vez no tenía la suficiente preparación para prosperar en esa jungla. Entonces se propuso emigrar a Estados Unidos para completar su formación. Era muy consciente de las dificultades que planteaba algo así, siendo una mujer en un país con una ideología anclada en el pasado. Sus padres, sin embargo, le apoyaron, y en 1978 ingresó en la Universidad de Yale.

Ese fue el punto de arranque de su gran éxito, en lo personal –en Yale conoció al que sería su marido– y en lo profesional. Aunque disponía de una beca de la universidad, Indra Nooyi aceptó trabajar de recepcionista nocturna para poder sobrevivir. En más de una ocasión ha reconocido que iba vestida con el sari porque “no tenía dinero para comprarme ropa”.

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Según ella misma ha contado su madre (Shantha Krishnamurthy) solía sentar cada noche a ella y a su hermana y les proponía un particular juego de sobremesa: ambas debían pensar el discurso que darían si fueran presidentas de la India. Al final de la cena, la mujer escuchaba atentamente las disertaciones y decidía por quién iba a votar. Pero otras veces el juego cambiaba y la consigna era: «Y si estuvieras casada y tuvieras hijos… ¿cómo te ocuparías de eso?«. «Lo que nos estaba diciendo en realidad era: sueñen y pueden ser lo que quieran… Pero se tienen que casar y tener hijos«.

Para su primera entrevista de trabajo en los Estados Unidos en la empresa Boston Consulting Group, Nooyi no tenía qué ponerse. En su armario sólo había jeans y ropa informal. El único lugar en el que podían venderle algo por los 50 dólares que tenía no incluía puertas en el probador. A Nooyi le dio desconfianza vestirse atrás de unas cortinas y prefirió llevar la ropa sin probarla. Así que llegó a la entrevista con un pantalón cinco centímetros más corto y un saco inmenso. Cuenta que los que la vieron entrar se asustaron. «Realmente me veía horrible. ¡Tenía un aspecto espantoso!».

Terminada la entrevista, Nooyi se puso a llorar y la encargada de consolarla fue la responsable de Recursos Humanos, que le preguntó qué se pondría para ir a una entrevista de trabajo en la India. «Un sari», dijo ella. Entonces, para la próxima entrevista ven con un sari, le propuso la mujer. Al día siguiente, Nooyi llegó a su entrevista laboral vestida con un traje tradicional de la India y se quedó con el único puesto que había vacante y para el cual habían entrevistado a más de cincuenta personas. «Si no te aceptan por ser quien eres, no te merecen«, le había dicho la mujer.

«Ahí entendí algo que nunca voy a olvidar. Los Estados Unidos son una meritocracia. Si uno hace bien su trabajo, si trabaja intensamente y es capaz, siempre te dan una oportunidad. No importa que seas hombre, mujer, india, argentina, alto, bajo..

Competir y trabajar

Indra es un claro ejemplo de lucha y esfuerzo por alcanzar un sueño. Ella era consciente que por su condición de mujer e india tenía que esforzarse más que los demás. Pero esta situación lejos de hacerle abandonar le sirvió de motivación para entregarse en los estudios y mejorar su formación. Cuando creyó que ya tenía capacidad para competir en el mercado laborar se enfrentó a la primera entrevista y, a pesar de no tener dinero para comprar la vestimenta adecuada, supo demostrar que conocimientos y aptitudes le sobraban. Se esforzó, estudió y compitió en un entorno altamente dominado por los hombres pero ella estaba segura de sus capacidades. Luego tuvo oportunidad de demostrarlo en los sucesivos puestos que ha ocupado llevándola al reconocimiento mundial.

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Y tú, ¿qué estrategia usas para triunfar? ¿Imitas a Indra Nooyi?

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