Lecciones de liderazgo de «El lobo de Wall Street»

por | Ene 29, 2014 | Desarrollo personal, Destacados, Liderazgo y Management, Negocios

El cine nos ofrece buenas lecciones de liderazgo. Hoy he visto la película de Martin Scorsese, «El lobo de Wall Street» que narra la historia de Jordan Belford (interpretado por Leonardo DiCaprio) como tiburón de las finanzas en la bolsa americana.

Aunque fue acusado y declarado culpable por manipulación del mercado de valores, lavado de dinero y otros delitos relacionados con las altas finanzas, Mr. Belford nos ofrece una buena lección de lo que debe  ser un líder (independientemente de que su trabajo fuera poco ético y se dedicaba a engañar a inocentes inversores).

Aunque algunos hechos que aparecen en la película puedan parecer una licencia del director, según publicó la revista Time a primeros de enero, la mayoría de sucesos relatados son completamente reales. Jordan Belfort, aún debe más de 70 millones de dólares a quienes estafó en los años 90.

5 lecciones de liderazgo de «El lobo de Wall Street»

Estas son, desde mi punto de vista, 5 lecciones de liderazgo que podemos aprender

1. El líder cree firmemente en lo que se propone

El verdadero líder tiene una meta clara y definida. No se anda por las ramas ni pierde el foco. Tiene claro lo que desea conseguir y se enfoca hacia ello sin perderse por el camino ni distraerse con otras cosas.

Jordan Belford no solo deseaba ser rico y tener dinero; además hacía todo lo necesario para llegar a serlo. Desear una cosa no sirve si no lo acompañas de las acciones necesarias para llegar a la meta deseada.

Lecciones de liderazgo de El lobo de wall street

2. Tiene un equipo de seguidores que comparten los mismos ideales

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El líder siempre cuenta con el apoyo de una legión de fieles seguidores que tienen la misma visión y objetivos. Ocurre lo mismo que en la película «300«: Leónidas, rey de Esparta, tiene a sus espartanos que piensan y ven lo mismo que él.

Todos los empleados de Straton Oakmont, la empresa de Belford, tienen la misma ambición por el dinero que su jefe. Jordan Belford supo embaucar a una pandilla de analfabetos hasta convertirlos en personas carentes de todo sentido ético porque solo ambicionaban una cosa: agrandar de forma continua su cuenta bancaria.

3. El líder es generoso con su equipo

Un líder que maltrata a su colegas tiene los días contados. Hay que saber recompensar y dosificar el placer para que todos estén contentos y satisfechos. Así resulta más fácil seguir al jefe. J. Belford regaló 10.000$ a una empleada solo por dejarse rapar la cabeza y les invitaba a continuas fiestas donde el sexo y las drogas no faltaban. Se gastó 26.000$ en una cena con sus principales directivos y amigos. La generosidad si es bien intencionada siempre es bien recibida.

4. Afronta los problemas conforme aparecen

El líder no se preocupa por problemas que no existen como las cebras no tienen estrés cuando comen. Sólo cuando aparecen las dificultades se organiza un plan de acción. Y sólo cuando aparece el león las cebras inician la carrera de huida.

Jordan Belford sabía que estaba realizando acciones ilegales. Sabía que engañaba a las personas cuando vendía acciones de «a centavo» de empresas casi inexistentes y él las ofrecía como si fueran una auténtica oportunidad imposible de rechazar que hará rico a quien lo compre.

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Pero sólo cuando aparecieron las señales de que el Fisco andaba tras él decidió buscar una salida para asegurar la ingente cantidad de dinero que había acumulado.

5. No espera las oportunidades, las crea

Cuando J. Belford pierde su primer empleo como agente de bolsa decide montar su propia empresa. No espera a que nadie le venga a contratar. Con sus conocimientos decide aventurarse y en viejo taller monta el germen de su futura empresa Straton Oakmont.

El líder no espera a que la oportunidad pase por su casa, va a buscarla y la crea. Steve Jobs hizo alego parecido cuando creó el ipod. El que se quede sentado esperando a la divina providencia….. seguirá esperando y sólo el que se aventura encuentra la oportunidad.

Estas son algunas lecciones de liderazgo que yo he extraído de la película, ¿y tú? ¿tienes alguna sugerencia?

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