Un buen líder saber perder, en la política y los negocios

por | Ene 20, 2021 | Liderazgo y Management, Política, Sociedad

Hoy 20 de enero de 2021 Donald Trump dará el relevo a Joe Biden como nuevo presidente de EE.UU. Pero Trump no sabe perder. Biden será el presidente número 46. El primero fue George Washington (entre 1789 y 1797​​). Desde entonces, ningún presidente había generado tanta polémica. Ninguno creó tanto odio. Ninguno había sido un político populista. Tal vez por eso, el presidente Trump representa al antilíder. Manipula las masas desde los sentimientos y emociones más primitivos. No emociona, no inspira. Donal Trump ha sido el chico malo de clase que se cree con el poder para hacer lo que quiere.

Donal Trump

Saber perder

Hay que saber perder. Esa es precisamente una de las características de la actividad política: unas veces se gana y otras se pierde. Pero saber perder implica estar situado a nivel personal y humano muy por encima del cargo que uno ostenta. Trump niega el resultado de las elecciones, reniega de la ratificación del Congreso, animó a la turba en el asalto al Capitolio y ha dicho que no acudirá a la toma de posesión de Joe Biden.

Es justo todo lo contrario a lo que hizo George H. W. Bush cuando entregó el relevo a Bill Clinton. Bush (1924-2018) fue el presidente 41 de Estados Unidos. El 20 de enero de 1993, un día antes de entregar la presidencia a su sucesor Bill Clinton, le dejó esta nota escrita a mano en la mesa del despacho oval en La Casa Blanca. La nota dice:

Estimado Bill,

Cuando entré hoy a esta oficina sentí el mismo respeto que hace cuatro años. Sé que también lo sentirás.  Te deseo mucha felicidad. Nunca sentí la soledad que algunos presidentes han descrito.  Habrá momentos muy duros, que se harán aun más difíciles por la crítica. No soy bueno dando consejos, pero no dejes que la crítica te desanime o te desvíe del camino. Serás nuestro presidente cuando leas esta nota. Deseo lo mejor para ti y tu familia.

Tu éxito es el éxito de nuestro país. Te apoyo.

Buena suerte,

George

Carta de Bush a Clinton

Perdedores que triunfan

Saber perder es una de las características de los verdaderos triunfadores. De hecho, Biden ha sido un claro perdedor a lo largo de su vida:

  • Recibió burlas cuando era niño porque no podía hablar bien.
  • En su segunda cita con Nelia (su primera esposa), Joe no tenía suficiente dinero para pagar la cuenta del restaurante. Neilia le deslizó $20 debajo de la mesa.
  • Fue reclutado para servir en el ejército, pero falló el examen físico porque tenía asma.
  • En 1988, Biden se sometió a una cirugía por un aneurisma cerebral. Tres meses después, fue operado de un segundo aneurisma cerebral.
  • Perdió a su primera esposa e hija en un accidente automovilístico.
  • Tras la muerte de su primera esposa e hija, tuvo problemas de salud mental que lo llevaron al borde del suicidio.
  • En 2015, perdió a su primogénito por un cáncer cerebral y si hijo menor ha sido adicto a las drogas la mayor parte de su vida.
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Joe Biden

Otro perdedor que logró alcanzar la victoria fue el mismísimo Abraham Lincoln: cosechó innumerables derrotas electorales pero nunca abandonó ni denigró a sus contrincantes.

Hizo de cada pérdida una fortaleza, supo convertir cada derrota en un nuevo reto. Y lo logró.

Como en el caso de Lincoln,lograr el éxito, triunfar en los negocios, en la vida,…. es una suma de fracasos. Pero como él sólo levantándose tras la caída se logra un verdadero avance y así hasta lograr la meta. No hay que tirar la toalla ante la primera adversidad. Es necesario hacerse fuerte, retomar aire y continuar con el plan fijado. El emprendedor debe saber que el camino hacia el éxito (la busca de la felicidad de Chris Gardner) es duro, pedregoso y con caídas. Lincoln nos enseñó con su tesón y perseverancia que todo esfuerzo y lucha conlleva recompensa.

Ser líder o mesías

La realidad es que muchas empresas y partidos políticos  ahora están dirigidas por mesías en lugar de líderes. Son personas iluminadas que se creen en la posesión de la ÚNICA verdad. Lo que dicen los demás no sirve, es falso o no merece crédito.

Las diferencias entre los líderes y los mesías son:

1. Los líderes crean y moldean una visión convincente; los mesías viven para ejecutar una visión de manera personalista. Los mesías se enfocan únicamente en los resultados; los líderes se obsesionan con la dirección, por el equipo y por las personas

2. Los líderes tienen como objetivo inspirar y motivar; los mesías consideran que su función consiste en mantener y administrarsus recursos existentes.

3. Los líderes sopesan y asumen riesgos; los mesías trabajan para controlar que los demás asuman los riesgos.

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4. Los líderes se enfocan en el largo plazo; los mesías están enfocados en el corto plazo y en en el culto a su persona.

Claves para saber perder

El hecho de haber perdido no implica que hayamos fracasado. Únicamente quiere decir que existen aspectos en nosotros que deben ser trabajados para ser mejores, o que alguien más hizo las cosas mejor que nosotros en un momento concreto, simplemente eso.

1. Deja atrás la frustración

Es natural que cuando perdemos nos invada una sensación de frustración por no haber alcanzado nuestras expectativas, pero debemos aprender a dejar atrás este sentimiento rápidamente. Pasar página y ponernos manos a la obra nuevamente es un aspecto clave.

2. Acepta las cosas como pasaron

Un aspecto fundamental para gestionar las derrotas es ver las cosas tal y como sucedieron en realidad, y evitar manipular los recuerdos en nuestra mente con la intención de “protegernos” de la sensación de frustración.

3. Evita las reacciones hostiles

La sensación de frustración que sentimos tras perder en algún aspecto de nuestras vidas puede llevarnos a tener reacciones hostiles. Esta situación únicamente conseguiría empeorar nuestra situación. Lo mejor será reconocer nuestro sentimiento y modularlo adecuadamente, haciendo que no frene nuestro progreso.

4. Dale más importancia al proceso

El hecho de ganar representa la consecución de un proceso en el cual tuvimos que habernos preparado para competir; o en su defecto implica que planificamos hacer las cosas de una determinada manera para conseguir unos resultados específicos. Por ello, saber perder tiene que entrar en la lógica de admitir que ese error no era inevitable, y que pudimos hacer más cosas para obtener mejores resultados.

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5. Evita el rol de favorito

Por más que las circunstancias estén a tu favor para optar a la victoria, el rol de favorito no siempre favorece a quien lo posee. De hecho, partir con la idea de que tenemos más opciones de ganar representa en la mayoría de los casos un arma de doble filo.

6. Evita el pensamiento túnel

El pensamiento túnel se refiere a que únicamente pensamos en ganar, y somos incapaces de mirar hacia las otras posibilidades. Este tipo de pensamiento es dañino, teniendo en cuenta que no siempre vamos a poder salir victoriosos. Habrá momentos en los que consigamos un empate, o una derrota.

7. Evita la estigmatización

Los estigmas son formas de pensamiento en los que el sujeto es radical al analizar las cosas; es “todo o nada”, no existen puntos medios. Debemos ser capaces de darnos cuenta cuando estamos yendo demasiado lejos en nuestra manera de ver las cosas y combatir esos pensamientos para tener mejores resultados.

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